Quijotes desde el balcón

martes, 6 de noviembre de 2012

Imposible Escapar (por Mario Lopez Nieto)





Imposible Escapar
(Mario Lopez Nieto)


Era imposible escapar de allí, aquel pasillo parecía interminable, y el miedo…no me dejaba andar todo lo deprisa de lo que en ese momento quisiera.
Notaba su presencia, cada vez mas cerca, cada vez mas oscuro, cada vez…. mas silencioso…
Solo quería escapar, escapar de ese lugar, y no sabia como, así que…me abandone a su voluntad.


Nunca he sido una persona valiente, de hecho mas bien me considero algo cobarde, si, ese soy yo, pero esa vez era diferente, no temía lo que pudiera pasarme, era una sensación extraña, la que, metida en mi cuerpo, hizo que me dejara atrapar.
De un momento a otro las luces parpadearon una y otra vez, y se proyectaron imágenes en algunos objetos en la habitación,  aterrorizado cogí el teléfono… pero cual fue mi sorpresa… no pude marcar numero alguno, pero sin embargo el teléfono sonaba como si lo hubiera hecho y cuando por fin alguien contesto, lo hizo con una voz   sobrenatural, misteriosa y aunque no logré entender lo que decía, presentí que esa voz intentaba prevenirme de algo…o alguien… del terror colgué. Mis ojos se llenaron de miedo, sentía y oía una presencia que gritaba de terror,  una oscuridad brumosa se fue apoderando de la habitación, y un golpe seco se escucho en la puerta,  en ese momento sentí mi alma abandonar  mi cuerpo, me avalancé hacia la puerta fue entonces cuando observé que el pomo giraba, la puerta se abrió, y al otro lado ,me encontraba yo,  por unos minutos no pude moverme ni decir palabra alguna, un frío gélido me invadio y me mantuvo paralizado hasta el momento en que note un golpe de calor alrededor de  mi cuello, noté entonces quejgfn la sangre salia borbotones y aunque con mis manos intentaba pararla  no cesaba de salir. Pasaron las horas y de repente me desperté, me mire y no tenia marca alguna, pensé que todo había sido un sueño.
 Corrí a casa para contar el extraño sueño a mis padres, pero al llegar a casa encontré mucha gente, toda vestida de negro, me acerque a mis padres pero no me oían… aún que les gritaba, corrí a mi cuarto y al entrar vi el ataúd, ese ataúd en el que yo me encontraba, degollado…

No hay comentarios:

Archivo del Blog