Quijotes desde el balcón

domingo, 12 de diciembre de 2021

¡Qué fuerte ser fuerte! (por Lourdes Siles Atienza)

 



Me dicen que sea fuerte. Que es la forma de enfrentar los problemas.  

Pero no saben que con cada letra que conforma la palabra se va creando en mí una armadura que me convierte en débil por dentro y aparentemente roble por fuera. 

Mi mirada se endurece con cada gesto de compostura, mis labios se tensan a la mínima que tiemblan en un amago de llanto, y mis puños se agarran fuerte a sí mismos para concentrar toda la energía que provoca esa actitud: 

 


Fuerza. 

 

Me dicen que sea fuerte. Que es la forma de alentar al resto. Que sin pronunciar su nombre lo demuestre y sin tan si quiera querer hacerlo lo haga. 

Fuerza. 

 

Qué palabra tan bonita y mal usada… 

 

Sé fuerte, no demuestres que eres persona, que eres humano y que te caes, que tienes miedo y a veces eres débil, que te vienen los recuerdos al abrir ese álbum del pasado y que te tiemblan hasta las pestañas cuando no llegas a fin de mes. 

 

Sé fuerte, ignora que a veces te sientes solo y roto y sigue adelante con sonrisas de cristal. 

Sé fuerte, evita abrazar en momentos críticos, no vaya a ser que tu corazón expanda la cuerda que lo ahoga. 

Demuestra que eres más. Más fuerte, más valiente, más inteligente, más capaz. 

Demuestra que no tienes miedo, que eres el que menos provoca la emoción, que te resistes menos a la sensación, que el recuerdo te duele menos, que menos… siempre, es más. 

Me dicen que sea fuerte… 

Cuando al final de la semana recurro al alcohol para creérmelo, cuando me mantengo en un trabajo que no quiero, cuando tengo que cuidar de mis hijos sin dinero, cuando el tiempo se me agota y escurre entre las manos y me veo viejo… 

 

Sé fuerte, demuestra, que eres más que eso.  

No hay comentarios:

Archivo del Blog