Brontë (por Pilar Gámez)

Con veinte años, Charlotte Brontë (autora de Jane Eyre) le mandó unos cuantos versos al célebre poeta  Southey. El artista le contestó que eran buenos, pero que "la literatura no puede ser el objetivo de la vida de una mujer, y no debe serlo."

Rosa Montero, Historias de mujeres

Transformaron en aire las rejas que las rodeaban
y construyeron con ellas la fortaleza
que les otorgó la inmortalidad.

Nacieron con la libertad escondida
bajo sus alas plegadas
y con la prudencia que caracteriza
al que se sabe dueño de la verdad
las desplegaron y emprendieron
el vuelo que las llevó más allá...
tan lejos que no escuchaban
ni los ecos de las voces de aquellas gentes
que afirmaban que no podían
porque no debían.

Se alejaron de la mansedumbre
se alejaron de las mentes
gobernadas por la mezquindad
se alejaron de la mediocridad.

Olvidaron el miedo
olvidaron la costumbre
olvidaron el prejuicio que aniquila
que ata
que mata

y se erigieron las dueñas y
transformaron en aire las rejas que las rodeaban
y construyeron con ellas la fortaleza
que les dio la inmortalidad.
Desplegaron sus alas y con voces
escritas en papel de libertad
emprendieron el vuelo

...hacia la eternidad.